Guarderías: pros y contras.
La asistencia a guarderías se asocia a un aumento significativo del riesgo de enfermedad infecciosa aguda en la infancia.
Si bien estos riesgos pueden ser asumibles en niños sanos, a menudo resultan cuantitativamente inaceptables en niños con enfermedades crónicas, hasta el punto de que la evitación de la guardería podría ser en ellos una intervención preventiva rentable.
Pero a la hora de decidir la conveniencia de que un niño sea atendido o no en una guardería, no deben considerarse solo los riesgos sobre su salud. También debemos tener en cuenta si la familia dispone de sistemas de cuidado alternativos, así como los posibles beneficios de socialización y estimulación de la escolarización precoz.
Podrían proponerse alternativas para reducir el nivel de exposición, disminuyendo las horas de asistencia o el número de niños por centro, educando a los cuidadores sobre los principios de la transmisión de enfermedades, extremando las medidas de higiene y dictando normas claras para el manejo de los casos aparecidos y la protección ( Ver «Prevenir infecciones«) de sus contactos.
Fuente: Evidencias en Pediatría